Estimado Pablo: Me han hecho una auditoría energética en casa y me han recomendado aislar mis tuberías. El coste estimado era bastante elevado y me pregunto, ¿merece realmente la pena?
Aislar las tuberías que llevan el agua caliente desde el calentador de agua hasta los distintos grifos es una tarea bastante sencilla, siempre que tengas fácil acceso a las tuberías. El aislamiento de las tuberías está disponible en espuma de polietileno o neopreno, así como en envoltura de fibra de vidrio. El aislamiento de las tuberías es barato (menos de 2 dólares por cada metro y medio de aislamiento de espuma), pero si no lo instalas tú mismo, la mano de obra contratada aumentará el coste total.
Hace unos años también me hicieron una auditoría energética de la casa y el aislamiento de las tuberías fue una de las recomendaciones. Las principales ventajas son la reducción de la pérdida de calor por convección de las tuberías, el aumento de la temperatura del agua en unos 4 grados y la posibilidad de bajar el nivel del calentador de agua, lo que ahorra energía.
Tabla de contenidos
¿Qué se ahorra con el aislamiento de las tuberías?
Por cada 10deg; F de reducción en el ajuste de la temperatura de tu calentador de agua puedes esperar reducir tu coste en un 3-5%. Si suponemos que el aislamiento de tus tuberías te permitirá reducir la temperatura de tu calentador de agua en cuatro grados sin que se note una reducción en el grifo, podemos suponer una reducción del coste en torno al 2%. El hogar medio gasta 400-600 dólares al año en el calentamiento del agua, por lo que esta reducción representa sólo unos 8-12 dólares al año.
La economía de aislar tus tuberías
El informe de la auditoría energética de mi casa ofrecía un presupuesto para aislar mis tuberías de agua caliente, de 680 dólares. Los presupuestos proporcionados por los auditores energéticos suelen ser subcontratados y están algo por encima de la norma del sector debido al margen de beneficio asociado. Acudir directamente al contratista, o incluso contratar a un «manitas» local para que haga el trabajo, reduciría bastante el coste. Incluso si puedes encontrar a alguien que lo haga por 100 dólares, el coste apenas justifica el ahorro de 8-12 dólares anuales, lo que supone un retorno de la inversión de 10 años (o 68 años si optas por el auditor energético).
La economía del aislamiento de bricolaje
Aunque pagar para que alguien aísle tus tuberías parece que no merece la pena, hacerlo tú mismo tiene mucho sentido. Hace poco aislé mis propias tuberías y me costó muy poco y tiene un gran rendimiento económico. Como ya iba a ir a la ferretería local y tenía que entrar en mi sótano de todos modos, decidí comprar un poco de aislamiento para tuberías y abordar este proyecto yo mismo. Pagué 9,52$ en materiales y espero ahorrar unos 10$ al año, por lo que la amortización es de 1 año. Además de la economía, hay otros beneficios de los que voy a disfrutar. Entre ellas está el hecho de que el agua caliente de mis tuberías permanecerá caliente más tiempo entre usos que sin aislamiento (lo que es mucho más barato que instalar y hacer funcionar una bomba de recirculación de agua caliente) y que los sonidos de mis tuberías al expandirse y contraerse con los cambios de temperatura disminuirán, debido a que la pérdida de calor es más lenta.
En conclusión, aislar tus tuberías tiene sentido desde el punto de vista económico, si lo haces tú mismo. Recurrir a un contratista rara vez tiene sentido económico en la mayoría de las casas, a menos que el combustible utilizado para calentar el agua sea muy caro, la distancia recorrida por las tuberías sea grande, las tuberías estén expuestas a aire muy frío (en cuyo caso deberían aislarse de todos modos para evitar que se congelen), y si la casa utiliza mucha agua. Por supuesto, en las construcciones nuevas casi siempre tiene sentido aislar las tuberías mientras sean fácilmente accesibles. Dado que muchas instalaciones comerciales y residenciales a gran escala cumplen estas condiciones, el aislamiento suele tener mucho sentido.
Instalar el calentador de agua sin depósito más cerca del punto de uso puede permitir la eliminación completa de las tuberías de agua caliente y elimina la pérdida de calor asociada. Los calentadores de agua sin depósito pueden ser más caros que los tradicionales, sobre todo si necesitas varios, pero tienen mucho sentido cuando el punto de uso está lejos del calentador. Esto no sólo ahorra energía, sino que también ahorra el agua que normalmente se desperdiciaría esperando a que llegue el agua caliente.
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