Los perros han vivido junto a nosotros durante miles de años, ganándose la reputación de «mejor amigo del hombre» por una buena razón. Pero aunque algunas personas se apresuren a descartar la devoción de un perro como una simple relación basada en la necesidad, los expertos dicen que eso no es cierto.
«Los perros han desarrollado la mayor capacidad de todos los animales de la Tierra para establecer vínculos afectivos con los humanos», dice el Dr. Frank McMillan D.V.M., director de estudios sobre el bienestar en Best Friends Animal Society, una organización que ayuda a los adoptantes a encontrar compañeros cariñosos. «Los perros no sólo nos quieren, sino que nos necesitan, pero no sólo por la comida y los cuidados físicos. Nos necesitan emocionalmente. Por eso el vínculo de apego que un perro siente por su humano es de profunda devoción y es, como se ha dicho a menudo, incondicional.»
¿Pero cómo dice exactamente un perro «te quiero»? Sigue leyendo para descubrirlo.
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Tu perro quiere estar cerca de ti.
Si tu perro está siempre en tu regazo, apoyado en ti o siguiéndote de una habitación a otra, está claro que tu perro está unido a ti.
«El afecto de un perro es más evidente en su deseo de estar físicamente cerca de ti. Esto puede parecer a veces un apego, y no siempre es fácil distinguir el apego positivo y saludable de la inseguridad, pero en ambos casos tu perro está profundamente apegado a ti», dice McMillan.
Tu perro te mira a los ojos.
Cuando tú y tu cachorro compartís una larga mirada, tu perro te está «abrazando con los ojos», según Brian Hare, profesor de la Universidad de Duke que estudia la cognición canina, y la investigación demuestra que este «abrazo» tiene un profundo efecto tanto en el hombre como en el animal.
Cuando los científicos de la Universidad japonesa de Azabu tomaron muestras de orina de perros y sus dueños antes y después de 30 minutos de interacción, descubrieron que las parejas que pasaron más tiempo mirándose a los ojos mostraban niveles significativamente más altos de la hormona oxitocina, la misma respuesta hormonal que nos une a los bebés humanos. «Es un hallazgo increíble que sugiere que los perros han secuestrado el sistema de vinculación humana», dijo Hare a Ciencia.
Tu perro te saluda emocionado.
¿Tu cachorro salta, mueve la cola y apenas parece poder contener su emoción cuando llegas a casa? Si es así, es una señal segura de afecto.
«Esto se hace aún más evidente cuando tu perro aprende, como los perros de Pavlov, que algún sonido señala tu próxima llegada, como el de la puerta del garaje o el sonido de tu coche, y muestra su excitación al oír ese sonido», dice McMillan.
Tu perro duerme contigo.
Los perros son animales de manada que a menudo se acurrucan por la noche en busca de calor y protección, así que cuando tu perro se acurruca contigo, significa que te considera parte de la familia. Y estos mimos caninos pueden incluso ayudarte a dormir mejor.
Tú eres el refugio de tu perro.
«Gran parte del afecto en los animales y en los humanos se basa en lo mucho que se puede confiar en ti como fuente de consuelo y apoyo en situaciones de miedo», dice McMillan. «Si tu perro busca tu consuelo durante tormentas, paseos en coche, visitas al veterinario u otros sucesos aterradores, entonces estás viendo otro aspecto de su vínculo de apego contigo.»
Tu perro te «lee» y reacciona en consecuencia.
Un vínculo estrecho con tu perro puede permitirle sentir tu estado de ánimo y responder con afecto. «Muchos perros que perciben que estás disgustado o que no te sientes bien demostrarán su afecto pasando más tiempo a tu lado. Puede que te den lametones o que apoyen su cabeza o sus patas en alguna parte de tu cuerpo», dice McMillan.
Tu perro bosteza cuando tú bostezas.
Si alguna vez has bostezado tras presenciar el bostezo de otra persona, eres consciente de lo contagioso que puede ser este acto. Este bostezo contagioso es exclusivo de unas pocas especies, y el mejor amigo del hombre es una de ellas.
Los investigadores han descubierto incluso que no sólo es más probable que los perros bostezcan después de ver bostezar a personas conocidas, sino también que los perros bostezarán cuando sólo oigan el sonido del bostezo de un ser querido. Así que si tu compañero canino bosteza en respuesta a tus bostezos, es muy probable que su afecto por ti le permita empatizar contigo.
Tu perro se centra en ti.
No es raro que los perros se deleiten con la atención positiva de prácticamente cualquier persona, pero el hecho de que tu perro quiera a todo el mundo no significa que no te quiera más a ti. Presta atención a cómo actúa tu perro cuando está en una habitación llena de gente. Si se mantiene centrado en ti o ignora a los demás mientras espera tu regreso, sabrás que ocupas un lugar especial en el corazón de tu perro.
Tu perro te perdona.
«Parte de los sentimientos de afecto que tiene tu perro hacia ti se manifiesta en su disposición a perdonarte por las cosas que haces que les hacen sentir mal, como levantar la voz o hacer que tu frustración se desvíe hacia tu perro al ignorarle», dice McMillan. «El perdón es el intento de tu perro de mantener el vínculo afectivo que comparte contigo».
Sin embargo, aunque tu mejor amigo canino no demuestre su afecto de estas formas, no significa que tu perro no te quiera. Al igual que algunas personas pueden preocuparse profundamente sin expresar sus sentimientos, tu cachorro también puede hacerlo.
«No repases la lista anterior y pienses que porque tu perro muestra muy pocas o incluso ninguna de estas cosas, no te quiere. Lo más probable es que el amor esté muy presente. Al fin y al cabo, estamos hablando de un perro», dice McMillan.
¿Y cómo puedes demostrarle a tu perro algo de amor? Participa en el juego, da un largo paseo, prepara unas deliciosas golosinas para perros o regala a tu cachorro un juguete casero. Por encima de todo, McMillan dice que lo mejor que puedes hacer es simplemente dar a tu perro más de ti, porque eso es lo que más quiere el mejor amigo del hombre.