La energía eólica existe desde hace miles de años. Los vientos libres y abundantes de la Tierra se utilizaban -y aún se utilizan- para navegar, moler el grano y bombear agua. Sólo recientemente los humanos han aprovechado esta energía para producir electricidad, pero ya es una parte importante y creciente de la mezcla, que alimenta alrededor del 8,4% de la red eléctrica en EE.UU. y el 6% en todo el mundo, con capacidad para mucho más.
La energía eólica tiene muchas ventajas: Es un tipo de energía renovable relativamente sencilla que, una vez instalada, no requiere mucho mantenimiento y no contamina el aire ni el agua. Lo más significativo es que, en un mundo en el que todos empezamos a sentir los efectos directos de la crisis climática, los aerogeneradores crean electricidad sin emisiones de gases de efecto invernadero.
Sin embargo, esta fuente de energía limpia también plantea retos y tiene algunas desventajas: las dos más importantes son su impacto medioambiental y la variabilidad inherente al viento. Existen medidas para mitigarlas, pero no hay que ignorarlas ni restarles importancia. Desde el punto de vista económico, la energía eólica tiene un coste inicial significativo, pero también lo tienen la mayoría de las formas de energía, ya que las plantas de combustibles fósiles requieren un mantenimiento mucho mayor, lo que implica mayores costes de funcionamiento.
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Qué es la energía eólica
El viento es un efecto secundario natural, gratuito y abundante de los procesos naturales de la Tierra, y la energía eólica es cualquier sistema que capta esa energía y la convierte en energía mecánica o en electricidad.
Los molinos de viento, una antigua forma de energía eólica, utilizan el viento para moler el grano o bombear agua convirtiendo la energía cinética del viento en energía mecánica. Los aerogeneradores, al igual que los molinos, tienen aspas que aprovechan el viento, pero luego esa energía se convierte en electricidad que se añade a la red eléctrica o se almacena en una batería.
Ventajas de la energía eólica
La ventaja más importante de la energía eólica es que genera electricidad sin contaminar el aire ni el agua, y sin añadir gases de efecto invernadero a la atmósfera. Pero también tiene otras ventajas medioambientales y económicas únicas.
Beneficios medioambientales
La energía eólica no contribuye al cambio climático. Aunque la fabricación y el transporte de las turbinas tienen un coste energético, un estudio sobre el ciclo de vida de los aerogeneradores reveló que su huella de carbono se amortiza en ahorro de CO2 en sólo seis meses de funcionamiento. En 2019, se evitó el equivalente a 43 millones de coches de CO2 al generar electricidad a partir del viento.
Fuente de energía renovable. El viento no escasea y no puede agotarse, por lo que la base de la energía eólica es un suministro renovable y sostenible. Esa energía no necesita ser extraída del suelo ni transportada por tren o camión, lo que requiere energía y emisiones adicionales y aumenta el coste de las centrales que queman combustibles fósiles. Y los nuevos modelos de aerogeneradores son cada vez más eficientes.
Cero emisiones. Una vez emplazado y colocado, un aerogenerador o parque eólico no genera efluentes ni emisiones. Las chimeneas no necesitan ser depuradas, y el material tóxico no necesita ser procesado, transportado, vertido o enterrado.
No necesita una fuente de agua cercana. El agua no es necesaria para el funcionamiento de un aerogenerador, ni se utiliza para refrigerar las máquinas ni para ningún otro fin, por lo que los aerogeneradores no necesitan estar situados cerca de cursos de agua ni conectados a fuentes de agua.
Beneficios económicos
Bajos costes de funcionamiento. Una vez instalados, los aerogeneradores tienen un bajo coste de funcionamiento.
Sin costes de origen. La energía eólica es gratuita, por lo que el coste de la fuente de energía es de 0$. Este ahorro de costes significa que es más barata que la forma de electricidad más popular en EE.UU., las centrales de carbón. Un estudio financiero de 2016 reveló que los proyectos eólicos no subvencionados cuestan entre 32 y 62 dólares por megavatio-hora. Los costes del carbón están entre 57 y 148 dólares por megavatio-hora. Se prevé que los costes bajen a medida que se espera que los vientos aumenten su fuerza en un mundo que cambia el clima, lo que podría significar que la energía derivada del viento sería mayor en los próximos años.
Las comunidades rurales también se benefician. Las instalaciones de energía eólica también benefician a las economías rurales porque la mayoría de los parques eólicos están situados en zonas menos pobladas. Por ejemplo, el condado de Mower, en Minnesota, generó más de 2,3 millones de dólares de ingresos fiscales relacionados con la energía eólica en 2018.
La energía eólica puede necesitar menos subvenciones para que siga siendo asequible. Todos los grandes sistemas de suministro de energía reciben subvenciones del gobierno, incluidas las plantas de carbón y los parques eólicos. Pero la industria de los combustibles fósiles puede obtener subvenciones y exenciones fiscales mucho mayores que las formas renovables, dependiendo de los factores que se tengan en cuenta. ¿Deben los costes artificialmente bajos de la minería en terrenos públicos contar para las subvenciones? Analistas medioambientales y financieros no se ponen de acuerdo al respecto.
Los aerogeneradores no contribuyen a la contaminación del aire ni a los peligros para la salud relacionados con ella. Se ha demostrado que las centrales eléctricas de carbón afectan negativamente a la salud de las personas, lo que conlleva gastos médicos. Éstos no suelen considerarse un «coste» de la producción de electricidad a base de carbón. Tanto si se trata de un efecto económico como de uno sobre la salud humana, o ambos, vale la pena considerarlo como un coste o un ahorro de costes cuando se trata de la energía eólica.
La energía eólica es flexible y permite la independencia energética. A diferencia de los combustibles fósiles, que generalmente necesitan una central eléctrica para crear electricidad de forma eficiente, la energía eólica es flexible en cuanto a tamaño y espacio. (Incluso los generadores domésticos de petróleo se utilizan sólo para cortes de emergencia, son ineficientes y además contaminan el aire local)
El tamaño y el número de aerogeneradores pueden variar según el lugar y las necesidades energéticas. Aunque al pensar en la energía eólica pueden surgir imágenes de parques eólicos con cientos de turbinas, también hay turbinas pequeñas y medianas que trabajan solas, en parejas o de tres en tres, proporcionando lo que se conoce como energía distribuida a las personas que la necesitan. En Estados Unidos, el Departamento de Energía informa de que hay más de 85.000 de estas turbinas más pequeñas, que aportan 1.145 megavatios de energía.
Escalabilidad. Las turbinas pequeñas pueden suministrar energía a hogares, ranchos, granjas o edificios; las turbinas más grandes pueden utilizarse para la generación local de electricidad para necesidades industriales o comunitarias.
Desventajas de la energía eólica
La energía eólica tiene algunos problemas importantes, el más conocido de los cuales es su impacto ecológico sobre las aves y los murciélagos. El ruido generado por las turbinas también ha sido citado por los opositores como un problema de calidad de vida para quienes viven cerca de ellas.
Fiabilidad
La fiabilidad de la energía eólica puede variar. Aunque las turbinas pueden producir energía el 90% del tiempo, puede que no funcionen al 100% de su capacidad: la media es del 35%.
Imprevisibilidad. El viento escaso o nulo apagará un aerogenerador, al igual que los vientos demasiado fuertes (para proteger la maquinaria). Durante ese tiempo, para mantener un flujo regular de electricidad se necesitará la energía eólica almacenada en baterías u otra fuente de energía.
Contaminación acústica y visual
Contaminación acústica. Los aerogeneradores pueden ser ruidosos, generando un sonido de entre 40 y 60 decibelios (comparable al de un aparato de aire acondicionado de ventana de tamaño medio). Evidentemente, esto puede molestar a las personas que viven cerca de las turbinas más pequeñas, pero los datos no son concluyentes sobre las repercusiones del ruido de los aerogeneradores en la salud.
Vida silvestre. El ruido de los aerogeneradores también puede afectar a la fauna, especialmente a las aves y los murciélagos, pero también a otros animales que utilizan vocalizaciones para comunicarse.
Estética. Algunas personas piensan que los aerogeneradores son feos y no les gusta verlos en el paisaje o sobre el agua.
Parpadeo de la sombra. Se trata de un fenómeno producido por las aspas giratorias de un aerogenerador junto con un sol bajo en el horizonte. Esto proyecta una sombra en movimiento que se percibe como un parpadeo cuando las aspas se mueven. Puede ser desorientador y molesto para quienes viven cerca de la turbina, aunque suele ocurrir sólo en circunstancias específicas y limitadas en el tiempo. Los efectos del parpadeo de la sombra pueden calcularse y mitigarse para minimizar el impacto. Las turbinas más pequeñas no tienen tanto problema con el parpadeo de la sombra, ya que son más cortas, por lo que esto es principalmente una preocupación con las turbinas más grandes.
Efectos ecológicos
Colisión de aves. Los aerogeneradores son responsables de un elevado número de muertes de aves. El estudio más conocido sobre la mortalidad por colisión de aves en las instalaciones eólicas reveló que, en el territorio continental de EE.UU., los aerogeneradores matan entre 140.000 y 328.000 aves cada año.Existen medidas de mitigación (construir parques eólicos lejos de las poblaciones más grandes de estos animales, o instalar un radar que apague las turbinas cuando las aves o los murciélagos estén cerca), pero aún se desconoce la eficacia de estos ajustes. Turbinas sin aspas podría ser otra solución a este importante problema.
Impacto en los ecosistemas locales. Un parque eólico, como cualquier otro desarrollo industrial a gran escala, tendrá un impacto en los ecosistemas locales. Aunque la mayor parte del terreno de un parque eólico puede ser utilizado por los animales para sus necesidades de hábitat, sigue habiendo carreteras de mantenimiento y otras infraestructuras, especialmente líneas eléctricas, que pueden afectar negativamente a la fauna de la zona.
Impacto potencial. El conjunto de efectos ecológicos de los parques eólicos aún no se conoce y pueden surgir consecuencias inesperadas. Por ejemplo, una investigación realizada en la India descubrió que había menos aves depredadoras cerca de los parques eólicos y muchos más lagartos, lo que alteró el equilibrio local de depredadores y presas.