Bienvenidos a Oymyakon (Rusia), donde el termómetro de la aldea no fue rival para las recientes temperaturas de -80 grados Fahrenheit.
En 1933, la aldea siberiana de Oymyakon se ganó el título de lugar habitado más frío de la Tierra cuando el mercurio descendió a unos gélidos -94 grados Fahrenheit (-68 Celsius). Situado a una latitud de 63,4608° N y 142,7858° E, a varios cientos de kilómetros del Círculo Polar Ártico, el frígido lugar permanece a oscuras hasta 21 horas al día durante el invierno, con una temperatura media de -58 F.
Hace tanto frío, escribe Sabrina Barr, que «La mayoría de la gente utiliza casas externas, porque las tuberías interiores tienden a congelarse. Los coches se guardan en garajes con calefacción o, si se dejan fuera, se dejan en marcha todo el tiempo. Los cultivos no crecen en el suelo helado, por lo que la gente sigue una dieta mayoritariamente carnívora: carne de reno, carne cruda de pescado congelado y cubitos de sangre de caballo con macarrones son algunas de las delicias locales».
También es una meca para los turistas extremos que buscan enfriarse, por así decirlo… tanto que el año pasado el pueblo instaló un termómetro digital para mostrar los impresionantes dígitos. Sin embargo, cuando la temperatura bajó recientemente a -80 F, el termómetro simplemente se rindió y dejó de funcionar, informa Barr. ¿Puedes culparlo?
Además de la distinción de ser el lugar más frío de la Tierra, el pueblo podría tener también un nuevo título: Hogar de la foto de pestañas congeladas, como demuestran las imágenes de Instagram de Anastasia Gruzdeva, una joven de 24 años que, junto con sus amigas, aparece luciendo lo último en tendencias de maquillaje por cortesía de la Madre Naturaleza.
Para saber más, coge un poco de cacao caliente y mira las escenas del lugar más frío del planeta en el siguiente vídeo.