Es hora de empezar a pensar en la sustancia por encima del estilo.
Los pantalones vaqueros pueden ser la prenda favorita de todo el mundo, pero son controvertidos desde el punto de vista del clima. La producción de vaqueros es notoriamente contaminante, consume mucha agua y es un derroche. Los vaqueros de moda muy desgastados, con chorro de arena o rotos no suelen durar mucho y acaban en los vertederos, sin poder ser reciclados debido a la mezcla de poliéster o a la adición de demasiados accesorios y acabados químicos al tejido.
Tiene que haber una forma mejor de disfrutar de los vaqueros, que tradicionalmente se construían para durar y soportar años de duro desgaste. Aunque algunos actores clave de la industria de los vaqueros han empezado a cambiar a métodos de producción más sanos y limpios (piensa en Lee, Levi’s, Mud y Nudie Jeans, cuyas iniciativas se describen en este artículo de The Guardian), la mayor parte de la responsabilidad sigue recayendo en los compradores, que deben tomar decisiones inteligentes. Aquí tienes algunas sugerencias para comprar buenos vaqueros, qué buscar y cómo cuidarlos.
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1. Ve a comprar de segunda mano.
En palabras de Anna Foster, fundadora de E.L.V. (East London Vintage) Denim, «hay más vaqueros que personas en el mundo». Haz una ronda por tus tiendas de segunda mano locales y encontrarás más vaqueros de los que puedas probarte. Esta es la forma más eficaz de reducir tu impacto en la moda, comprar productos de segunda mano que de otro modo se desperdiciarían. Prolonga su vida útil, retrasa las emisiones de metano, ahórrate mucho dinero y frena la demanda de recursos vírgenes.
2. Elige el material más natural.
Menos procesamiento significa un menor impacto medioambiental. Evita los vaqueros con acabados extravagantes, brillos y remaches superfluos, así como los que han sido blanqueados, chorreados o lavados con ácido. En su lugar, opta por la tela vaquera cruda o seca, que no ha sido lavada ni tratada. Al principio tendrá un aspecto más rígido y nuevo, pero con el tiempo se suavizará con el uso. Sin embargo, si compras de segunda mano, es posible que ya tengas tela vaquera cruda desgastada, lo que es ideal.
3. Mira la etiqueta.
Evita los vaqueros elásticos porque no se pueden reciclar, ya que el algodón se mezcla con el poliéster. Tamsin Blanchard escribió en The Guardian: «El cien por cien [de algodón] significa que el tejido vaquero de tus vaqueros puede ser reciclado en algún momento». Hay que reconocer que me cuesta este consejo porque los vaqueros elásticos me quedan mejor que los de algodón puro, pero no duran tanto porque suelen ser más finos y se desgastan en los muslos. Me cuesta mucho más encontrar un buen par de vaqueros de algodón 100%, pero cuando lo consigo son una auténtica delicia.
4. Lava menos. Mucho menos.
El director general de Levi’s fue noticia en 2014 cuando dijo que sus vaqueros no se habían lavado en un año. Hiut Denim tiene un Club de No Lavado al que la gente puede unirse sólo si no ha lavado sus vaqueros durante al menos seis meses. De su sitio web:
«Algunos de los verdaderos incondicionales han pasado 12 meses o más sin lavar sus vaqueros. Al igual que los mejores clubes, se ha convertido en una verdadera insignia de honor. Y así debería ser. Cuanto más tiempo puedas dejar un par de vaqueros nuevos sin lavarlos, más bonito será el par de vaqueros que tendrás al final».
En lugar de lavarlos, prueba a airear los vaqueros en un tendedero y a utilizar un spray desodorante o a pasar un paño húmedo si es necesario. La idea de la congelación propuesta por Levi’s en 2011 ha sido desacreditada, ya que no elimina las bacterias; sin embargo, Smithsonian Magazine escribió que «la carga bacteriana no parece verse muy afectada por la frecuencia de los lavados. Un experimento poco científico realizado por un estudiante canadiense encontró poca diferencia en la carga bacteriana entre un par de vaqueros usados durante 15 meses sin lavar y otro par usado durante 13 días.» Cuando los laves, utiliza agua fría y detergente natural y cuélgalos para que se sequen.