Las sopas reconfortantes vuelven a estar en el menú -ya sea porque hace frío y está húmedo fuera o porque, de alguna manera, te has resfriado o algo peor- y tenemos siete recetas estupendas para compartir, una para cada noche fría de la semana.
Minestrone: Esta receta hace una enorme y sabrosa olla de este favorito italiano que está lleno de verduras y hierbas frescas. Un consejo que no está en la receta. Si tienes cáscaras de queso parmesano que puedas echar mientras se cocina la sopa, hazlo. Le da a la sopa una profundidad de sabor adicional.
Sopa de fideos con pollo: Es imposible sacar de una lata el mismo confort que proporciona la sopa de fideos con pollo hecha en casa. Esta receta es fácil de hacer y está llena de sabores frescos. Cuando vayas a desmenuzar el pollo para ésta o cualquier otra receta, utiliza tu batidora eléctrica para desmenuzar el pollo en un tiempo récord.
Sopa de tomate, berenjena y pimiento amarillo: Las verduras deben estar todavía disponibles en el mercado de agricultores para esta sopa cremosa que es una transición perfecta de las comidas de clima cálido a las de clima frío. También combina bien con sándwiches de queso a la plancha.
Sopa de Otoño: Esta sopa es «confort en un bol» y es definitivamente una sopa de otoño. Lo dice el propio nombre. Maíz, zanahorias, ajo, cebolla, patatas, queso cheddar y mucho más forman parte de esta sustanciosa sopa.
Sopa de calabaza y manzana con especias del suroeste: Esta sopa, que es a la vez dulce y ácida, es también cálida y reconfortante. También es vegana.
Sopa de ternera y cebada en olla de cocción lenta: Tu cocina olerá de forma acogedora durante todo el día cuando hagas la sopa en tu olla de cocción lenta. Esta sopa de ternera y cebada se prepara rápidamente una vez que se dora la carne (o se utiliza la carne sobrante de la cena de otra noche) y se cocina a fuego lento durante ocho horas.
Sopa de guisantes partidos: Esta receta lleva jamón (la forma clásica de hacer sopa de guisantes partidos), pero también tiene instrucciones para hacerla vegetariana omitiendo el jamón y añadiendo un poco de miso para darle profundidad de sabor. En cualquier caso, sabrá muy bien y te calentará en una noche fría.