Más allá de los parabenos: 7 ingredientes comunes de los cosméticos que debes evitar

La elección del consumidor es algo poderoso. Di «salta o me gastaré mi dinero en otro sitio» y harás que los ejecutivos se peleen para usarse unos a otros como improvisados trampolines humanos. Es por esta razón y sólo por esta razón -al menos para las grandes empresas- por lo que estamos viendo tal proliferación de productos que proclaman alegremente que están libres de BPA. Pues bien, los parabenos son el bisfenol-A de la industria de la belleza, desde los aterradores titulares hasta las alegres proclamas que te hacen llegar cuando un producto los ha eliminado.

Pero, como ya hemos dicho, los parabenos no son el único ingrediente desagradable que hay que evitar. He aquí otros siete ingredientes tóxicos que aparecen regularmente en los cosméticos y productos para el cuidado de la piel. Presta atención a estas señales de alarma la próxima vez que salgas con tu carro de la compra; quién sabe, quizás algún hombre bien vestido se te acerque para preguntarte si Bill de Contabilidad podría hacer algunas acrobacias aéreas para tu placer.

1. Fragancia

Frasco de perfume en el alféizar de una ventana

Examina la letra pequeña de la mayoría de las etiquetas de productos de cuidado personal y seguro que encuentras «fragancia» (o, si quieres ponerte elegante, «parfum») compitiendo con sus hermanos multisilábicos. Como se consideran secretos comerciales, las fragancias caen en una colosal laguna jurídica de la ley federal que no obliga a las empresas a revelar los cientos de sustancias químicas que puede contener la fórmula olfativa de un solo producto.  

Este simple término puede ocultar sustancias sospechosas relacionadas con innumerables problemas de salud, desde alergias hasta alteraciones endocrinas. En 2002, tres cuartas partes de los 72 productos analizados por el Grupo%20de%20Trabajo%20Medioambiental%20contenían%20ftalatos,%20sustancias%20químicas%20plastificantes%20relacionadas%20con%20defectos%20de%20nacimiento,%20feminización%20de%20los%20niños,%20daños%20hepáticos%20y%20renales%20e%20infertilidad.%20Ninguno%20de%20los%20productos,%20entre%20los%20que%20se%20encontraban%20marcas%20como%20Cover%20Girl,%20Pantene,%20Dove,%20L’Oréal%20y%20Revlon,%20tenía%20la%20palabra%20″ftalatos» en sus envases, lo cual es aún más insidioso.

2. Polietilenglicol

Polietilenglicol, más conocido por sus siglas, PEG, no es un ingrediente único, sino una clase de polímeros de etilenglicol que hidratan, mantienen estables los productos y mejoran la penetración de otros ingredientes, tanto buenos como malos. Los PEG suelen ir seguidos de un número que se corresponde con el número de unidades de etilenglicol que contienen, por ejemplo PEG-4 o PEG-100; cuanto más bajo sea el número, más fácilmente se absorbe el compuesto en la piel.

Aunque los PEG pueden ser irritantes leves, son menos deseables sobre todo porque ayudan a traficar con sustancias químicas extrañas a través de tu epidermis, incluyendo un montón de impurezas con las que a menudo están contaminadas. Según un informe publicado en el Diario Internacional de Toxicología por la Revisión de Ingredientes Cosméticos, entre los contaminantes encontrados en varios compuestos de PEG se encuentran el óxido de etileno (utilizado para fabricar gas mostaza), el 1,4-dioxano, los compuestos aromáticos policíclicos y los metales pesados (plomo, hierro, cobalto, níquel, cadmio y arsénico).  

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