Profesor de biología evolutiva en la Universidad de Arizona, Alexander Badyaev también es un galardonado fotógrafo de la naturaleza. Inspirado por ambas pasiones, tal vez, su curiosidad fue despertada por los esqueletos de cervatillos y conejos que solía encontrar posados en las ramas de los árboles de madera de hierro frente a su casa en el desierto cerca de Tucson, Arizona.
«Una vez que descubrí que estos árboles son centros sociales de actividad del zorro gris, me enganché a la observación de estos animales y al aprendizaje de su biología», dice.%20Como%20se%20explica%20en%20la%20revista%20de%20la%20Academia%20de%20Ciencias%20de%20California,%20bioGráfico, la curiosa especie evolucionó por primera vez hace más de siete millones de años en los exuberantes bosques tropicales que antaño envolvían la zona que hoy es el suroeste de Estados Unidos.
«Desde entonces, este zorro anatómicamente distinto ha acumulado un impresionante conjunto de adaptaciones no propias de un zorro para la vida en las copas de los árboles», señala bioGraphic, «incluyendo muñecas flexibles similares a las de los primates y patas parecidas a las de un gato con garras largas y curvadas que le permiten agarrarse a las ramas de los árboles».
Al preferir los bosques caducifolios intercalados con zonas arboladas y de maleza, estos duendecillos nocturnos con garras retráctiles son los únicos cánidos capaces de trepar a los árboles. Incluso se han encontrado sus guaridas escondidas a gran altura en troncos y ramas huecas.
En la increíble foto de Badyaev que se ve arriba, una pareja de zorros grises (que en general son monógamos) reina sobre su hogar en un árbol de madera de hierro, que se tambalea a gran altura sobre el suelo del Desierto de Sonora, con el esqueleto de un cervatillo muerto por un coyote. «Las parejas de zorros utilizan los esqueletos como postes de olor punzante para marcar sus territorios. Sobre todo después de la lluvia, el olor de estos «árboles de esqueletos» puede ser muy potente y puede recorrer grandes distancias», escribe bioGraphic.
Un territorio típico de una pareja reproductora tiene dos o tres de estos árboles esqueléticos, dice%20Badyaev,%20señalando%20que%20los%20esqueletos%20también%20se%20utilizan%20para%20descansar.%20Para%20Badyaev,%20una%20buena%20fotografía%20″capta la esencia de una especie concreta; en cierto sentido, es el resumen de todos los conocimientos sobre lo que hace y es el animal». Para un zorro trepador de árboles totalmente único que engalana su hogar con esqueletos, esta foto es perfecta… no lo dudes.