De mangata a murr-ma, el vocabulario de una cultura dice mucho de lo que importa a las personas que usan las palabras.
Me encantan las palabras. Me encanta la naturaleza y me encantan las diferentes culturas del mundo. Así que, ¿es de extrañar que adore las palabras sobre la naturaleza de otros lugares? Dicen tanto, a su manera impronunciable, sobre los lugares donde se usan y las personas de cuyas bocas surgen. De la misma manera que se supone que hay 50 (o 100 o más) palabras inuit para la nieve, el lenguaje se desarrolla en torno a las necesidades y a las cosas que importan. Incluso si las cosas que importan son simples, como el color de una hoja cuando se marchita antes de morir.
Feuillemort (francés, adjetivo): Tener el color de una hoja marchita y moribunda.
Escribo mucho sobre el lenguaje y el mundo natural, así que me encantó encontrarme recientemente con un libro titulado «Perdido en la traducción: An Illustrated Compendium of Untranslatable Words from Around the World» de Ella Francis Sanders. Aunque no se centra exclusivamente en las palabras sobre la naturaleza -hay varias categorías cubiertas-, he tomado prestadas algunas palabras pertinentes de su dulce libro, y he añadido otras que he recogido por el camino. Tal vez si todos empezamos a utilizar alguna de estas palabras que resuenan, algunas se pondrán de moda y adoptarán un acento americano. Cuantas más palabras tengamos sobre el mundo natural, en mi opinión, mejor.
Mangata (sueco, sustantivo): El reflejo de la luna en el agua que parece un camino.
Ammil (inglés, Devon, sustantivo): La fina película de hielo que barniza el exterior cuando una helada sigue a un deshielo parcial, y que a la luz del sol puede hacer brillar todo un paisaje.
Komorebi (japonés, sustantivo): La luz del sol que se filtra a través de las hojas de los árboles.
Gurfa (árabe, sustantivo): la cantidad de agua que se puede sostener en una mano.
Poronkusema (finlandés, sustantivo): la distancia que un reno puede recorrer cómodamente antes de hacer un descanso.
Eit (gaélico, sustantivo): La práctica de colocar piedras brillantes en los arroyos para que brillen a la luz de la luna y atraigan a los salmones a finales del verano y en otoño.
Murr-ma (wagiman, verbo): El acto de buscar algo en el agua sólo con los pies.
Kalpa (sánscrito, sustantivo): El paso del tiempo en una gran escala cosmológica.
Waldeinsamkeit (alemán, sustantivo): La sensación de estar solo en el bosque, una soledad fácil y una conexión con la naturaleza.
¿Tienes alguna que añadir a la lista? ¡Todas las aportaciones son bienvenidas! Y con esto, me voy a deleitar con un poco de komorebi.