Días después de que la Comisión Europea presentara su Acuerdo Verde Europeo con el que la UE pretende garantizar una transición ecológica socialmente justa, la Xunta de Galicia decidió anunciar también su última propuesta para reverdecer la comunidad autónoma sin que esto afecte negativamente a su economía.
Así, a punto de acabar el 2019 como un año especialmente marcado por el aumento en la conciencia ecológica, Galicia ha dado luz verde a su Estratexia galega de Economía Circular, un plan que consta de 60 medidas concretas en torno a ocho líneas temáticas que tienen que ver con las famosas R: repensar, rediseñar, refabricar, reparar, redistribuir, reducir, reutilizar, reciclar y recuperar.
La idea que subyace es que el cambio de modelo productivo —necesario para que nuestro consumo y producción estén en línea con los límites del planeta— no entorpezca el crecimiento económico de la región. Se trata de que esta transición suponga incluso nuevas oportunidades de negocio.
La Xunta destina 865 millones de euros a la Estratexia galega de economía circular
De aquí a 2030, la Xunta destinará a este plan hasta 865 millones de euros, una dotación económica que, calculan, generará un retorno de más de 6.000 euros en ese periodo, el equivalente al 1,12% del PIB gallego.
Las áreas donde se centra la estrategia son varias: desde la investigación para proyectos de reutilización de aguas residuales hasta el impulso al ecodiseño (sobre todo en el sector de los envases), pasando por la promoción de ecoparques industriales más eficientes e innovadores y la reducción de plásticos en el sector alimentario.
Una parte importante del nuevo reverdecimiento gallego es su apuesta por la contratación verde. Según lo han anunciado, la estrategia activa una modalidad de contratación pública que priorizará las opciones que tengan criterios ecológicos.
Además, para la reducción de los residuos urbanos, la Xunta pondrá en marcha a partir de 2020 una nueva línea de subvenciones para que las entidades locales pongan a disposición de sus vecinos espacios de autorreparación e intercambio de objetos. Y, en paralelo, se invertirán 25 millones de euros en la construcción de tres nuevas plantas públicas para el tratamiento de los biorresiduos, y se destinarán 2,6 millones para mejoras en la gestión.
Galicia quiere alcanzar la neutralidad climática en 2050
Por otro lado, en el marco de la cumbre del clima de Naciones Unidas que tuvo lugar en Madrid las dos primeras semanas de diciembre, Galicia presentó su Estrategia Gallega de Cambio Climático y Energía (EGCCE) 2050. Según explicó la Xunta en un comunicado, Galicia ha sido “una de las primeras comunidades españolas en ponerse a trabajar en esta línea, creando una dirección general específica para canalizar todas las políticas relacionadas con este fenómeno”.
El objetivo es que la comunidad autónoma sea neutra en carbono para el año 2050 —en coherencia con la meta de neutralidad climática marcada por Europa—, misión en la que el sector forestal gallego jugará un papel central, alegan, en tanto que las emisiones de CO2 que no puedan ser eliminadas (puesto que ya fueron emitidas a la atmósfera) podrán ser absorbidas por el propio entorno natural.
Alcanzar la neutralidad climática pasará también por aumentar la participación de las energías renovables en el mix energético, “incrementando la potencia renovable instalada, fomentando el autoconsumo”; así como la eficiencia energética en todos los sectores y la movilidad sostenible, “ofreciendo alternativas al vehículo privado con un sistema de transporte público de calidad y ambientalmente sostenible, tal como se concibe en el Plan de Transporte de Galicia de la Consellería de Infraestructuras y Movilidad”.
Bajo el título “Galicia resiliente: comunidad y clima”, este plan se centra en tres ámbitos de actuación: la adaptación a los efectos del cambio climático, la sensibilización de la ciudadanía y la investigación y la innovación.
Consta de 170 medidas que se pondrán en marcha de aquí a 2023 y “de forma transversal en todas las áreas del gobierno autonómico”, con una inversión de más de 1.250 millones de euros.