Hay muchas formas de reutilizar tus viejos cartones de huevos, pero he querido centrarme en los proyectos que son sencillos y dan a los cartones una oportunidad de tener una segunda vida antes de ser reciclados. Muchas de estas ideas te permiten utilizar los cartones de huevos en lugar de comprar algo para el mismo fin.
Tabla de contenidos
Comenzar a sembrar semillas
Si alguna vez has guardado un cartón de huevos para reutilizarlo, probablemente haya sido como iniciador de semillas. No es necesario comprar iniciadores de semillas de plástico ni tampoco los compostables, los cartones de huevos son la herramienta perfecta para el trabajo. Los cartones tienen compartimentos de tamaño perfecto para el cultivo de plántulas. Una vez que las plantas sean lo suficientemente grandes como para trasladarlas a tu jardín, no hace falta sacarlas. Sólo tienes que recortar los vasos individuales del cartón y colocarlos directamente en la tierra. El papel se acabará rompiendo a medida que las plantas crezcan.
Alimentadores para pájaros
Si te gusta observar a los pájaros desde tu ventana, es fácil y rápido montar un comedero para pájaros de cartón de huevos. Sólo necesitas el cartón, algunas semillas y un poco de cuerda. Puedes seguir el tutorial de El Cubil Creativo para hacer un comedero como el de la foto de arriba. Corta el cartón, llénalo de semillas y luego cuélgalo de tu árbol favorito.
Material de embalaje
Una de las cosas más útiles que puedes hacer con los cartones de huevos viejos es reutilizarlos como material de embalaje. Si tienes que enviar un paquete o te vas a mudar, esos molestos cacahuetes para embalar, el costoso plástico de burbujas y el papel de envolver no tienen por qué formar parte de ello. Corta la tapa de los cartones y utiliza los fondos acolchados para forrar una caja de artículos frágiles. También puedes cortar los cartones para utilizarlos en lugar de los cacahuetes de embalaje. Ahorrarás dinero y evitarás la propagación de esos horribles cacahuetes de poliestireno para embalaje.
Iniciadores de fuego
Si tienes una chimenea, te gusta hacer fuego en una hoguera exterior o vas de acampada, probablemente hayas utilizado iniciadores del fuego para encenderlo rápidamente. Guarda los cartones de huevos y no tendrás que volver a comprar palos para encender el fuego. Rellena las hueveras con materiales orgánicos inflamables como pelusa de secadora, hierba seca, serrín, virutas de lápiz y otros. Vierte cera de parafina o restos de velas fundidas en las copas y mézclalo todo. Deja que las mezclas se asienten y luego recorta cada taza y guárdalas en un lugar que no esté expuesto al calor. Ahora, tus iniciadores de fuego estarán listos cuando los necesites.
Alimenta tu compost
Si tienes un cubo de compostaje, puede que ya estés echando las cáscaras de los huevos, ¡pero no dejes de lado el cartón! Los cubos de compostaje necesitan una combinación casi al 50% de ingredientes verdes (restos de fruta y verdura, cáscaras de huevo, recortes de césped frescos, etc.) y marrones (hojas y hierba seca, cartón y papel triturados, cáscaras de frutos secos, etc.) para alimentar a los microorganismos que descomponen toda esa materia orgánica y la convierten en un suelo rico en nutrientes. Rompe el cartón en trozos pequeños y añádelo a tu pila o contenedor, junto con cualquier otro residuo de cartón o papel que tengas. Sólo asegúrate de añadirlo con una cantidad igual de restos de comida.
Ponte a hacer manualidades
Si tienes niños en casa, los cartones de huevos son tus mejores amigos. Las cajas son un gran material artístico y tu imaginación es el límite. Sólo tienes que buscar en Pinterest manualidades con cartones de huevos y encontrarás más de las que creías posibles. Los cartones de huevos son paletas de pintura ideales. Las tazas tienen el tamaño perfecto para un buen chorro de cada color y puedes utilizarlas una y otra vez. Sólo tienes que dejar que la pintura se seque en los vasos y rellenarlos con el mismo color la próxima vez. Si no tienes niños, puedes donarlos a un centro de preescolar local, un museo infantil o un centro de arte. Esos lugares siempre buscan material artístico extra.
Regálalos
¿Conoces a alguien que tenga gallinas? ¿Tienes una granja local favorita a la que compras en el mercado ecológico o eres miembro de una CSA? Es probable que necesiten cartones adicionales para envasar huevos frescos. Repártelos y, si tienes suerte, puede que te devuelvan uno lleno de más huevos.