No eres el único que tiene que averiguar cómo vencer el calor. Puede que las mascotas se queden más en casa, pero siguen necesitando salir al exterior durante una ola de calor. Los animales salvajes también luchan para hacer frente a las olas de calor y a las sequías.
Toma, por ejemplo, el pequeño erizo. Durante una de las olas de calor de Inglaterra, los erizos luchaban por mantenerse vivos, sobre todo las crías. Necesitaban agua, y no había ninguna.
Por suerte, unos ciudadanos preocupados se encargaron de que los erizos tuvieran agua. Son las acciones sencillas las que marcan la diferencia, y aquí tienes algunas que puedes llevar a cabo para ayudar a la fauna de tu zona.
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Mantén el agua fluyendo
Lo primero y más importante es asegurarse de que las criaturas salvajes tienen suficiente agua y fácil acceso a ella. Como explica la Federación Nacional de la Vida Silvestre (NWF), «Tener un suministro conveniente de agua limpia puede suponer una gran diferencia para la supervivencia de las especies silvestres locales, como pájaros, mariposas y pequeños mamíferos, durante las épocas de calor extremo y sequía.»
Esto es especialmente cierto en el caso de los animales pequeños que pueden no tener un amplio radio de acción, o en el caso de los animales que son más móviles pero que se deshidratan.
Mantener el agua en tu jardín tampoco requerirá que tengas la manguera encendida. En su lugar, asegúrate de que hay un baño para pájaros en tu jardín y que el agua está limpia y fresca. (La NWF recomienda poner una jarra de goteo cerca del baño para pájaros, algo que permita que el agua caiga en el baño para pájaros. El goteo atraerá a los pájaros al agua. Una vez allí, beberán y se refrescarán.
Por supuesto, no todos los animales pueden llegar a un baño para pájaros, ni tampoco es necesario que ciertos animales estén cerca del baño para pájaros (te miro a ti, gatos). Para las criaturas más pequeñas, como los erizos mencionados anteriormente, proporcionarles pequeños cuencos de agua poco profundos es la mejor manera de asegurarse de que se hidratan. Si no tienes cuencos pequeños, la Real Sociedad para la Prevención de la Crueldad contra los Animales (RSPCA) recomienda colocar un palo o una piedra en un cuenco más grande para que el animal pueda trepar para salir del cuenco después de haber saciado su sed.
La inclinación a dejar comida para los bichos es comprensible, pero los expertos la desaconsejan. La NWF dice que el agua es más importante para la supervivencia general de los animales -pueden arreglárselas sin comida durante un tiempo, pero no sin agua- y la RSPCA desaconseja alimentar a los animales salvajes.
Si tienes un jardín, mantenerlo ayudará tanto a las criaturas como a los insectos. Un jardín especialmente frondoso puede proporcionar la sombra que algunos animales ansían, y cubrir tus lechos con mantillo también ayudará a que la tierra se mantenga un poco húmeda, y eso ayudará a las lombrices y otros insectos. El agua, por supuesto, desempeña un papel en esto, y mantener tus plantas regadas atraerá a los insectos que dependen de las plantas para alimentarse.
Ayudar a la fauna con el estrés térmico
Además de necesitar agua, los animales pueden necesitar cierta ayuda en caso de estrés por calor. Los animales se sobrecalientan y se deshidratan igual que nosotros, y manifiestan algunos de los mismos síntomas, como confusión, pérdida de equilibrio y colapso. Si ves en el suelo animales que normalmente están en los árboles, o si son normalmente nocturnos y los ves durante el día, es probable que algo vaya mal.
Ayudar a los animales salvajes que sufren estrés por calor puede ser complicado, y si no te sientes cómodo o seguro haciéndolo, no lo hagas. Ponte en contacto con los servicios para animales o con los veterinarios.
Sin embargo, si te sientes cómodo, la RSPCA recomienda envolver al animal en una toalla y contenerlo en una caja de cartón. Proporciona al animal agua para beber en una zona fresca y segura. Humedecer la toalla o rociar al animal con niebla también puede ayudar a enfriar al bicho. No obstante, se recomienda recurrir a la ayuda de profesionales, ya que las interacciones humanas pueden ser estresantes para los animales. Si tienes que transportar al animal a una clínica, enfría primero el coche y minimiza los ruidos dentro del mismo.
Y si te haces daño mientras ayudas a un animal, busca asistencia médica lo antes posible.
Proteger a tus mascotas
Aunque tu perro no pase horas al aire libre durante una intensa ola de calor, muchas de estas normas siguen siendo aplicables. Pero un elemento que afectará a un perro más que a otros animales es el pavimento caliente. La temperatura del asfalto puede alcanzar temperaturas mucho más altas que el aire y quemar las patas de tu mascota. Para saber si el pavimento está demasiado caliente, pon el dorso de tu mano en el suelo. Si está demasiado caliente para tu mano, está demasiado caliente para tu perro.
«Lo mejor es mantenerse alejado de los caminos de cemento en la medida de lo posible», dijo Aly DelaCoeur, conductista de animales y asistente veterinaria en Seattle, a Chewy.com. «Pero evitar el cemento no tiene por qué significar rehuir el ejercicio».
Los veterinarios recomiendan que pasees a tu perro a primera hora de la mañana o a última de la tarde y sobre la hierba en la medida de lo posible. Si vives en una zona urbana con poco acceso a espacios verdes, quizá quieras invertir en patucos para cubrir las patas de tu perro. Aunque les cueste un poco adaptarse a llevar zapatos, puede ayudar a prevenir daños.
Durante el verano, comprueba periódicamente si las patas de tu perro presentan quemaduras o piel seca y agrietada. Si parecen dañadas, aplícales una pomada hecha sólo para perros.
Las mismas reglas se aplican a los gatos. «Sin embargo, si el gato es principalmente un gato de exterior, ya ha aprendido qué superficies se calientan y a no pisarlas», dice DelaCoeur. Aun así, querrás comprobar sus patas.
Como siempre, si la temperatura es demasiado alta, lo mejor es mantener a tus mascotas dentro de casa todo lo posible y proporcionarles mucha agua.