Conocido por su impresionante velocidad y sus características manchas, el guepardo es el animal terrestre más rápido de la Tierra. Desde su cara llena de lágrimas hasta su pelaje moteado, este larguirucho y atlético gran felino domina el camuflaje. Tiene un cuerpo diseñado para correr por las praderas para abatir a sus presas.
A diferencia de otros grandes felinos, los guepardos no son siempre solitarios y nunca rugen. De hecho, suenan más bien como tu amistoso gato doméstico e incluso se sabe que maúllan y ronronean. Explora los datos más interesantes sobre este conocido velocista.
Tabla de contenidos
1. Los guepardos son el mamífero terrestre más rápido del mundo
Los guepardos son capaces de pasar de cero a 60 millas por hora (97 kph) en sólo tres segundos. Cuando corren a toda velocidad, recorren unos 21 pies (6 a 7 metros) con cada zancada. Sus pies sólo tocan el suelo unas dos veces en cada zancada, según el Fondo de Conservación del Guepardo. Después de una persecución, el guepardo necesita unos 30 minutos para recuperar el aliento antes de comer.
En 2012, Sarah, una guepardo de 11 años del zoo de Cincinnati, batió su anterior récord, recorriendo 100 metros a una velocidad máxima de 61 mph (98 kph) en 5,95 segundos.El olímpico Usain Bolt, que tiene el récord mundial (humano), es mucho más lento en comparación: 100 metros en 9,58 segundos.
2. Están hechos para la velocidad
La increíble velocidad de los guepardos es producto de su mecánica corporal. Tienen una columna vertebral flexible que les permite estirarse y cubrir mucho terreno en cada zancada. Sus largas patas les ayudan a correr rápido y a desplazarse a grandes distancias. El guepardo también tiene una cola musculosa y plana que funciona casi como el timón de un barco, ayudándoles a mantener el equilibrio y a cambiar de dirección. Sus garras semirretráctiles actúan como tacos, ayudando al gran felino a ganar tracción al correr, y las almohadillas de sus patas duras funcionan como la goma de un neumático.
3. Los guepardos no rugen, maúllan y ronronean
No hay nada que asuste en los ruidos que hace un guepardo. A diferencia de los leones, que son conocidos por sus feroces rugidos, los guepardos suenan más bien como un gato doméstico normal. Maúllan y ronronean. También emiten chirridos y chirridos. Escucha a algunos guepardos parlanchines del zoo de Toronto.
Hay cuatro grandes felinos que rugen: leones, tigres, leopardos y jaguares. Son capaces de emitir sus ruidos intimidatorios porque tienen un ligamento en lugar del hueso epihial en la caja de la voz. El ligamento se estira, creando sonidos más graves. Los guepardos tienen una caja de voz fija con cuerdas vocales divididas. Al igual que los «gatos pequeños», esto les permite ronronear, pero limita los ruidos que pueden hacer.
4. Corren hacia la extinción
En 1900 había más de 100.000 guepardos, pero ahora hay menos de 7.000 guepardos adultos y adolescentes en libertad. Los guepardos están clasificados como vulnerables en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), y están catalogados como en peligro de extinción según la Ley de Especies en Peligro de Estados Unidos.
Los guepardos se enfrentan a las amenazas de la pérdida de hábitat, los conflictos con los humanos, el comercio ilegal y los problemas de reproducción debido a su limitada diversidad genética. Cuando los humanos invaden su territorio, los grandes felinos se quedan sin espacio y sin presas. Esto les obliga a adentrarse en las granjas y los pastos, buscando alimento en los rebaños de ganado.
No es la primera vez que la población de guepardos es tan precaria y a los científicos les preocupa que la especie pueda extinguirse. El gran felino se ha enfrentado a dos eventos históricos de cuello de botella que redujeron drásticamente el tamaño de su población, según un informe de 2017 publicado en el Journal of Heredity. Un acontecimiento ocurrió hace 100.000 años y otro hace entre 10.000 y 12.000 años. En ambos casos, la población se redujo en gran medida, dejando a los guepardos restantes con mutaciones potencialmente dañinas y una reserva genética mucho más pequeña.
5. Sus ojos les ayudan a cazar
A diferencia de la mayoría de los grandes felinos, los guepardos cazan de día. Suben a un termitero o a una pequeña colina y utilizan su aguda visión para localizar a la presa, y luego se lanzan a la carrera. El guepardo utiliza su velocidad de vértigo para ir a la carrera tras su cena, tirando a la presa al suelo y agarrándose a su garganta.
Los guepardos tienen unas características líneas oscuras en forma de marcas de lágrimas que van desde la comisura de los ojos hasta la boca. Estas marcas desvían el sol, lo que les facilita la caza durante el día. Sin el resplandor del sol, son capaces de concentrarse en sus objetivos, según el Fondo de Conservación del Guepardo.
6. Tienen un camuflaje natural
Los guepardos tienen un pelaje moteado que les ayuda a mimetizarse con su entorno. Eso no sólo les ayuda a esconderse cuando acechan a sus presas, sino que también les mantiene a salvo de los depredadores, señala el Zoológico Nacional. Las manchas no son sólo de pelaje: su piel tiene manchas negras.
Además de las manchas, los cachorros de guepardo tienen lo que parece una cresta de pelo en todo el cuerpo. Llamado manto, este largo mechón de pelo les recorre desde el cuello hasta la base de la cola. El Fondo para la Conservación del Guepardo explica que el manto hace que los cachorros se parezcan a los tejones de la miel y les ayuda a camuflarse en la hierba alta. Este camuflaje les protege de depredadores como las hienas y los leones.
Excepto los leones, que viven en grupos llamados manadas, la mayoría de los grandes felinos son animales relativamente solitarios. Prefieren estar solos, excepto cuando se aparean o crían. Los guepardos no son «ni solitarios ni sociales, sino un poco de ambos», dice el Zoológico de San Diego.
Las guepardas hembras son en su mayoría criaturas solitarias. Sólo se emparejan para aparearse y luego se quedan con sus cachorros mientras los crían. Los machos suelen ser solitarios, pero los hermanos suelen vivir en grupos llamados coaliciones. Los guepardos cazan solos y evitan las escaramuzas, excepto cuando se pelean por la pareja.
8. A los guepardos les gusta la comida rápida y no beben mucho
Los guepardos son carnívoros que se alimentan de pequeños animales que pueden perseguir y matar fácilmente. Eso incluye antílopes más pequeños, como las gacelas de Thomson y las gacelas de primavera, así como conejos, puercoespines y aves que viven en el suelo, informa el zoo de San Diego. Se comen la carne rápidamente antes de que depredadores más agresivos como leopardos, leones, babuinos, chacales y hienas se acerquen a su cena y les obliguen a renunciar a ella. Incluso pueden ser ahuyentados por los buitres. Aunque los guepardos son rápidos, no son lo suficientemente fuertes o agresivos como para arrastrar su comida muy lejos o protegerla de estos feroces competidores. Los guepardos sólo necesitan beber agua cada tres o cuatro días.
Salva a los guepardos
- No compres productos fabricados con partes de guepardo.
- Apoya la legislación para proteger a los guepardos, como la Ley de Seguridad Pública de los Gatos Grandes.
- Difunde la información sobre cómo el comercio ilegal de mascotas perjudica a los guepardos y a otros animales en peligro de extinción.
- Apoya el trabajo de las organizaciones de conservación, como el Fondo de Conservación del Guepardo.