Al muérdago se le considera una plaga porque hace que el árbol donde resida pierda sus ramas y además muera. Además, algunos insectos pueden llegar al árbol huésped y perjudicarlo aún más. Estos insectos son la polilla de mármol y los gorgojos, los cuales carcomen gran parte de la planta.
Para su desarrollo el muérdago penetra en la corteza del árbol para absorber sus nutrientes como es el caso del agua y las sales minerales. Al realizar esta función el árbol huésped se debilita y se vuelve susceptible a otras plagas.
En este artículo podrás encontrar todo lo relacionado con los parásitos que atacan al muérdago.
Parásitos del muérdago
La gran mayoría de los muérdagos están presentes en varios ecosistemas. Al muérdago enano se le considera un agente destructor propio de los climas templados.
El muérdago, además de ser es un elemento relevante en los ecosistemas de los árboles, contiene sustancias que podrían servir para elaborar diferentes medicinas.
El muérdago puede ocasionar en el huésped una serie de daños graves como pueden ser:
- Afectar el desarrollo en cuanto a la altura y el grosor del tronco del árbol.
- Hacer vulnerable a la planta por medio de los ataques de insectos u otros depredadores.
- Reducir el proceso de la fotosíntesis.
- Afectar la estética de la planta.
- Reducir notablemente la cantidad de frutos.
- Disminuir la calidad de la madera en el árbol.
- Ocasionar daños fisiológicos y bioquímicos.
Un árbol huésped que esté saludable y en el que crece un muérdago puede infectarse en algunas ramas únicamente, pero en otros casos la infestación puede ser generalizada e incide en el poco crecimiento de este árbol o presentar muchas ramas secas o llegar a acabarse.
Es característico que el muérdago de hoja ancha ataque a si mismo a los árboles de hoja ancha o a algunas coníferas.
Por otra parte, el muérdago enano ataca a las coníferas que son plantas más pequeñas y de tallos reducidos haciendo que produzcan muchas ramas. En este caso las semillas que van madurando caen fuera de la planta y pueden llegar a una distancia de 30 cm aproximadamente. Estos muérdagos enanos tienen la tendencia de ser más dañinos.
Cuando los robles están fuertes y sanos pueden llegar a aceptar un poco más al muérdago, aunque es posible que se quiebren algunas de sus ramas. Por lo general en la mayoría de los árboles no se presenta ningún otro síntoma de infección.
El control más efectivo para el muérdago de hoja perenne es cortar las ramas del árbol donde está creciendo. El corte de poda debe hacerse al menos 30 centímetros por debajo del punto de unión para asegurarse de que la estructura interna de la raíz de la planta se elimine por completo.
Este procedimiento hay que hacerse antes de que el muérdago produzca semillas que lleguen a infestar otras ramas y puede ser una poda manual o mecánica, ya que, sirve para controlar el número de plantas de muérdago por árbol hospedero y llegar a erradicarlos para que cumplan su papel en el medio ambiente.
Hoy en día para la erradicación del muérdago se cuenta con una sustancia cuya aplicación sólo elimina al parásito sin dañar al árbol hospedero ni al ambiente. Aunque es común que algunos productos solo controlen el crecimiento del muérdago por un corto tiempo más no lo erradiquen.
Cuando no se puede limpiar definitivamente el tronco del árbol o alguna rama que este infectada se puede podar el muérdago y envolver el sitio donde estaba la parásita con plástico negro de polietileno sujetándolo con cinta y para así evitar la luz. Dejar este plástico en un tiempo de dos años para que el muérdago muera. Si el plástico se rompe es necesario remplazarlo.
Como el muérdago se propaga de un árbol a otro de forma fácil y de una propiedad a otra se hace necesario eliminarlo de todos los árboles para evitar su aparición.
No es común que el muérdago ataque al peral floreciente bradford, pistacho chino, eucalipto y cedro entre otros. Por otra parte, hay variedades como el peral floreciente, el aliso y el fresno que son muy susceptibles de ser atacados por el muérdago. Es importante buscar especies que no sean de fácil infestación por parte de esta planta.
El muérdago también ofrece recursos a la fauna. Cuando florecen el néctar es atractivo para los colibríes, mariposas, abejas, avispas y otros. En invierno proveen alimento a algunas especies de aves quienes además aportan al proceso de la polinización. También son base nutricional para especies del bosque, por eso hay que reconocerle su aporte ecológico.