Porque estaba leyendo tu reciente columna sobre el dilema de Becky, obsesionada con los exfoliantes, y me di cuenta de que yo también tengo una adicción inocente que puede ser mala para la Tierra: las velas aromáticas. Me encantan: votivas de arándanos, pilares de lima con cilantro, velas de especias de calabaza, flotadores de lavanda, lo que sea… cada vez que me acerco a un radio de 10 millas de Ye Olde Candle Shoppe, me dan palpitaciones. Sigo viendo velas de soja por ahí y escuchando que son «mejores», pero no sé exactamente por qué. La cera es la cera, ¿no? ¿Me puedes informar?
Sayonara,
Ali, Reseda, California.
A: Deja por un momento esas cerillas de cocina, ponte en estado zen y escucha al sensei de la cera de soja. A mí, como a ti, me gustan las velas perfumadas y admitiré abiertamente que una vez compré una de una lujosa marca francesa que empieza por «D» y termina en «E» que me costó aproximadamente 70 dólares. Aquel día debía de llevar mis vaqueros de mala idea…
De todas formas, comprar y quemar velas no es lo más ecológico que puedes hacer por ahí. Son relajantes (sobre todo con un poco de John Tesh de fondo), huelen bien (la mayoría de las veces) y son interesantes elementos de decoración interior (sobre todo cuando se moldean con forma de animales). Pero sí, los rumores que has oído sobre las velas de cera de soja son correctos. Son «mejores» y deberías comprarlas y quemarlas en lugar de las variedades de cera estándar.
Aquí tienes el porqué: La cera de las velas está hecha de un subproducto del petróleo, la parafina. Quemar una vela de parafina, aunque huela a deliciosa tarta de manzana, es como invitar a un camión diésel a tu casa para que suelte los gases de escape… el hollín del combustible diésel y de la cera de parafina contiene una mezcla nociva de petrocarbono cancerígeno que puede afectar a tu salud, ennegrecer el interior de tu casa y emitir sustancias químicas tóxicas como el benceno y el tolueno. Asqueroso. Y como probablemente sabes, el petróleo no es precisamente renovable.
La cera de soja vegetal no es 100% perfecta (como muchos productos agrícolas), pero es muchísimo mejor que la «cera de gas». Se queman durante más tiempo (sin el hollín), están disponibles en tantas fragancias tentadoras y, a menudo, las empresas que producen velas de soja se esfuerzan por utilizar envases con contenido reciclado y mechas de papel/algodón sin plomo. La mayoría de las tiendas de velas y boutiques del hogar deberían tener líneas de velas de soja y, si no las tienen, pídelas. Sólo asegúrate de que sean 100% de cera de soja.
En mi propia casa, quemo velas de soja vertidas a mano en Filadelfia de Duross y Langel. Son asequibles y vienen en un montón de aromas potentes; recomiendo la pera, el acai y la hierba del mono.
Ves, Ali-san, es bastante sencillo. A no ser que te guste la contaminación del aire interior, elige la soja, que en su día fue una desventaja, pero que ahora es un oponente formidable en el enfrentamiento entre la cera natural y la química. Continúa y arde con fuerza, amigo mío. Mi entrenamiento aquí ha terminado.