Microondas u horno tostador, ¿cuál es el aparato de cocina más ecológico?

Así que te has dado cuenta de que puedes ahorrar mucha energía cambiando los hornos por aparatos de cocina más pequeños, como el microondas o el horno tostador, a la hora de recalentar la comida. Pero… ¿qué es mejor, el microondas o el horno tostador? Vamos a ver con más detalle cuál es el mejor de los dos.

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Uso de la energía

Cuando se trata del consumo de energía, la competencia entre un microondas y un horno tostador, en realidad no es una gran competencia. Un microondas consume una media de 750-1100 vatios. Un horno tostador consume alrededor de 1200-1700 (Salvadores de Energía). Esencialmente, cuando se utiliza un aparato de encimera en lugar de un horno convencional, un horno tostador utilizará aproximadamente la mitad de la energía, mientras que un microondas utiliza aproximadamenteun tercio de la energía.

Es fácil ver que, en general, usarás menos energía si eliges un microondas. El verdadero truco está en cómo lo vas a utilizar y cómo quieres que se cocinen los alimentos.

Usos variados

Un microondas y un horno tostador se utilizan para fines distintos. Si quieres algo caliente ahora, y no te importa mucho el resultado de la comida más allá de que esté caliente, entonces un microondas es lo mejor. Pero si quieres imitar la cocción en el horno, entonces lo mejor es un horno tostador, que calienta la comida más lentamente pero también de forma más uniforme. En cualquier caso, ahorrarás dinero y energía con respecto a un horno convencional si utilizas los aparatos para recalentar alimentos o cocinar comidas pequeñas y rápidas.

Sin embargo, hay una diferencia no sólo en el resultado de la comida, sino también en el tiempo que se pasa con el aparato encendido. Un microondas se utiliza normalmente para recalentar alimentos o cocinar comidas congeladas. A no ser que no utilices el horno en absoluto y cocines lasañas congeladas, que tardan unos 25 minutos, es probable que sólo utilices el microondas unos minutos cada vez. Un uso medio diario es de unos 15 minutos en total a máxima potencia para recalentar la comida. Suponiendo un precio medio de 0,10 dólares por kilovatio hora, eso suma 0,36 kwh, o sea 0,04 dólares. (Consumer Energy Center)

Para un horno tostador, se necesita más tiempo para calentar la comida. Normalmente, un horno tostador se precalienta durante unos minutos, y luego la comida se hornea o se asa. Por ejemplo, recalentar un trozo de pizza lleva unos 2 minutos en un microondas, pero unos 5 minutos a 350 grados en un horno tostador. El uso medio diario para recalentar comida es de unos 50 minutos a 425 grados, lo que supone una media de 0,95 kwh, o 0,10 dólares. (Consumer Energy Center)

El momento de decidir

¿Vale la pena la factura de energía adicional para tener una comida que parece y sabe como si acabara de salir del horno? En última instancia, depende de ti. Tanto el microondas como el horno tostador tienen una variedad de ajustes que te permiten versatilidad a la hora de cocinar. En un microondas, puedes hacer de todo, desde recalentar pasta hasta hervir agua, descongelar una pechuga de pollo o hacer palomitas. Con un horno tostador, puedes hornear, tostar, asar, etc.

Una regla general es que si quieres que la comida se caliente rápidamente y con el menor consumo de energía, opta por un microondas. Pero si quieres que la comida se caliente bien y con la mitad de energía que el horno, opta por un horno tostador.

Por supuesto, también es posible tener ambos aparatos y utilizarlos según tus necesidades, maximizando el ahorro de energía del microondas cuando corresponda, y la calidad del horno tostador cuando corresponda, y evitando por completo el horno convencional en muchos casos.

Consejos para la compra y el uso

Hay algunas cosas que debes tener en cuenta para conseguir el aparato más eficiente desde el punto de vista energético.

Cuando compres, fíjate en la potencia cuando compares. Elige un aparato que esté en el extremo inferior del rango de consumo de energía. El hecho de que sea un aparato de mayor potencia no significa automáticamente que cocine mejor. Además, si vas a utilizar el aparato a diario, opta por la convección: la circulación de aire cocinará los alimentos de forma más uniforme y a una temperatura más completa.

En el caso de los microondas, utilízalos para recalentar comida o para alimentos que se cocinen rápidamente, más que para comidas grandes. Cocinar una lasaña congelada o una patata en el microondas no es más eficiente que usar el horno.

Para los hornos tostadores, trátalos como un horno. Por ejemplo, el precalentamiento puede ser útil pero no siempre necesario. Si crees que tienes que precalentar, minimiza el tiempo de calentamiento del horno tostador. Además, es mejor usarlo para recalentar y para comidas más pequeñas. Para las comidas grandes, opta por una olla grande en el horno convencional o en la olla de cocción lenta para que te queden sobras. Al final será más eficiente energéticamente.

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