No conectarse a la red con paneles solares: Todo lo que necesitas saber

Ya sea para ayudar a reducir los costes de la electricidad o simplemente por un deseo general de vivir desconectado del resto de la sociedad, cada vez hay más gente que elige desconectarse de la red. Aunque el concepto de «desconectarse de la red» parece bastante sencillo, llevarlo a la práctica puede ser complicado y costoso si no estás bien preparado.

Si te planteas la idea de desconectarte de la red mediante paneles solares, ten en cuenta aspectos como los costes, la instalación y las leyes locales antes de dar el paso.

Tabla de contenidos

Energía solar conectada a la red eléctrica vs. energía solar aislada

Desde el punto de vista de la electricidad, desconectar tu casa de la red significa eliminar cualquier conexión a la red eléctrica de tu zona. Esta red eléctrica suele ser la responsable de suministrar energía a la mayoría de los hogares, edificios y empresas de la región, por lo que necesitarás un sistema de energía personal in situ que pueda satisfacer todas las necesidades de electricidad de tu hogar.

Los sistemas sin conexión a la red son más populares en lugares remotos, donde los costes añadidos de las baterías, los paneles solares y los generadores son menores que el coste de extender las líneas eléctricas a la red principal. Según el Departamento de Energía de EE.UU., el coste de ampliar las líneas eléctricas existentes para conectarlas a la red en zonas remotas puede oscilar entre 15.000 y 50.000 dólares por kilómetro.

Es importante señalar que la instalación de paneles solares tampoco significa necesariamente que te hayas desconectado de la red. Los sistemas típicos de energía solar no siempre están diseñados para generar suficiente electricidad para alimentar toda una casa, sino que mantienen una conexión con la red principal de la compañía eléctrica como respaldo. Esto se conoce como sistema híbrido, una opción menos costosa y más flexible, especialmente para los propietarios que viven más cerca de la red eléctrica de su zona.

¿Qué sistema debo elegir?

Cuando se trata de energía solar fuera de la red, los paneles solares monocristalinos suelen ser los más utilizados. Esto se debe a que, por lo general, son más eficientes y tienen una vida útil más larga. Sin embargo, los paneles solares monocristalinos son más caros y generan una gran cantidad de residuos durante su producción.

Otra opción son los paneles solares policristalinos, que son más baratos que los monocristalinos. Los policristalinos pueden no ser una buena opción si intentas desconectarte de la red en una propiedad pequeña, ya que los paneles son más grandes y ocupan más espacio, aunque pueden ser más eficientes en situaciones de poca luz que los monocristalinos.

La tercera opción principal son las células solares de capa fina, que son más ligeras y dejan una menor huella de carbono, aunque los materiales con los que se fabrican pueden ser muy tóxicos y filtrarse a las aguas subterráneas si no se desechan adecuadamente.

Costes

El primer paso para desconectarte de la red con la energía solar es determinar si es o no ventajoso económicamente para tu casa. Podrás averiguarlo calculando la cantidad de energía que utilizas, determinando cuántas baterías solares necesitarás, investigando los sistemas solares que se ajustan a tus necesidades específicas, y luego sumando los costes.

Para calcular cuántos paneles solares y baterías necesitas para desconectarte completamente de la red, comprueba la cifra de consumo mensual de tu factura personal de electricidad o multiplica los vatios de tus aparatos por el número de horas que los utilizas al día. El Departamento de Energía de EE.UU. tiene una práctica calculadora para ayudarte a estimar la carga eléctrica de los electrodomésticos más comunes, o siempre puedes comprar un monitor de energía doméstico para obtener una cifra exacta.

También necesitarás un generador de reserva y baterías solares para almacenar la electricidad producida por el sistema de paneles solares para los días nublados, cuando se vaya la luz, o por la noche cuando los paneles no estén produciendo energía. Tu consumo diario de electricidad te ayudará con esto, ya que puedes compararlo con la cantidad de electricidad almacenada en una batería específica (o «energía utilizable»). En 2020, el hogar estadounidense medio utilizó unos 10.715 kilovatios hora (kWh) de energía eléctrica al año, o una media de 893 kWh cada mes.

Permisos

Si puedes o no instalar paneles solares fuera de la red en tu propiedad depende de las leyes de tu condado y de tu estado. Por ejemplo, en California, debes ser o emplear un contratista con licencia C-10 o C-46 (o una persona cualificada según el último Código Eléctrico de California) para poder instalar un sistema solar sin conexión a la red.

Algunos estados incluso disuaden a los residentes de vivir sin conexión a la red imponiendo leyes más duras, exigiendo que utilices determinados materiales o incluso no permitiéndote vivir en casas de cierto tamaño con sistemas sin conexión a la red. Sin embargo, la mayoría de los estados tienen algún tipo de normativa de construcción para los sistemas de paneles solares, así que asegúrate de consultar el sitio web de tu condado o de contratar a un instalador de paneles solares autorizado para que te ayude en el proceso.

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