1. Los cantos de muchas especies de aves son muy complejos y pueden contener decenas de notas por segundo. Según PBS, los pájaros cantores pueden hacer hasta 30 mini-respiraciones por segundo para mantener la melodía.
2. Los pájaros cantores de una misma especie pueden tener diferentes dialectos según su zona geográfica. Sus cantos serán ligeramente diferentes según el lugar en el que vivan, del mismo modo que las personas que hablan el mismo idioma tienen acentos según el lugar en el que se hayan criado. El gorrión de corona blanca es un gran ejemplo de ello, ya que los distintos miembros de la población tienen distintos dialectos en sus cantos dependiendo de su «barrio».
3. Las aves no nacen conociendo los cantos de su población. Al igual que los humanos, tienen que escuchar el canto de los adultos para captar el «lenguaje»
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«Al igual que un niño que aprende a hablar, un pájaro cantor debe escuchar los sonidos vocales de los adultos durante un periodo crítico y luego escuchar su propia voz cuando aprende a imitar esos sonidos», según Brain Facts. De hecho, algunos científicos estudian cómo los pájaros aprenden a cantar como una forma de entender mejor cómo los humanos aprenden a hablar.
4. En la mayoría de los casos, cuando oyes el canto de un pájaro, probablemente estés oyendo a un macho. Los machos utilizan el canto para atraer a sus parejas y delimitar su territorio mediante el canto.
5. Varias especies de pájaros cantores no cantan sólo sus propias melodías, sino que se apropian también de las de otras especies. La curruca de los pantanos conoce los cantos tanto de las especies europeas como de las africanas, ya que emigra a África en invierno, y puede conocer los distintos cantos de hasta 70 especies de aves más.
«El gorrión cantor, por ejemplo, canta quizás 10 canciones cada uno, los chochines de los pantanos y los sinsontes tienen hasta 200 canciones diferentes y los trenzadores marrones cantan hasta 2.000 canciones», escribe The New York Times.
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