La actividad humana está calentando nuestro planeta, esto está científicamente probado. Lo que también está científicamente probado es que otras cosas, desde los volcanes hasta los glaciares, también pueden influir en nuestro clima.
Comencemos con las cosas que hacen que nuestro clima sea más fresco.
Y el primero es algo extremadamente caliente: los volcanes. Los grandes, especialmente los de los trópicos, pueden cambiar nuestro clima.
El polvo que envían a la atmósfera refleja la luz del sol, lo que reduce las temperaturas globales.
En 1991, un volcán en Filipinas hizo erupción y enfrió el clima entre 0,1 y 0,2 grados.
Lo que hay que tener en cuenta sobre los volcanes es que el efecto que tienen es pequeño y de corta duración.
El siguiente paso es la contaminación por partículas finas de los automóviles y la industria. Esa bruma marrón que ves sobre la ciudad en realidad está bloqueando la radiación solar.
El hecho de que existan emisiones de aerosoles industriales significa que, de hecho, lo que se percibe como cambio climático es menor que lo que sería si no hubiera, o menos, contaminación por partículas.
Vincent-Henri Peuch Copernicus Servicio de vigilancia de la atmósfera
De hecho, la contaminación del aire por parte de los humanos hace que el clima sea medio grado (-0,5 ° C) más frío de lo que sería de otra manera.
Así que en realidad estamos enmascarando los efectos de todas nuestras emisiones de dióxido de carbono y metano.
“Desde el punto de vista del calentamiento global”, dice Vincent-Henri Peuch del Servicio de Monitoreo de la Atmósfera de Copernicus. “El hecho de que haya emisiones de aerosoles industriales significa que, de hecho, lo que se percibe como cambio climático es menor que lo que sería si no hubiera, o menos, contaminación por partículas”.
Otras cosas en la naturaleza pueden hacer que nuestro clima sea más cálido o más frío, como el hielo.
Si hay mucho hielo cubriendo la tierra o el mar, refleja la luz hacia la atmósfera y enfría el planeta.
Si el hielo se derrite, revela el océano oscuro o la tierra debajo, que absorbe la luz solar y calienta el planeta. Esto es lo que está sucediendo en el Ártico y Siberia en los últimos años.
Todo es fascinante, pero al final del día, la razón número uno absoluta por la que nuestro planeta se está calentando cada década es que los humanos hacemos cosas como quemar petróleo, gas y carbón, y talar bosques.