Los murciélagos son los monstruos viciosos de tus peores pesadillas, si eres un escarabajo, una mosca, una polilla o un mosquito. Para los humanos, sin embargo, los murciélagos son más una bendición que una maldición.
Eso se debe en parte a que muchas personas están malditas, o al menos molestas, por los insectos. Con más murciélagos revoloteando al anochecer, hay menos mosquitos y moscas que propaguen enfermedades, menos polillas que pululen por las farolas y menos escarabajos y larvas de polilla que asalten los huertos. Sólo por mantener a raya las plagas de los cultivos, los murciélagos ahorran a los cultivadores de maíz de EE.UU. unos mil millones de dólares cada año. Su valor para la agricultura estadounidense oscila entre los 3.700 y los 53.000 millones de dólares anuales en total.
De las aproximadamente 1.200 especies de murciélagos conocidas, alrededor del 70% son «micromurciélagos» que arrancan acrobáticamente insectos de la noche. El otro 30% son en su mayoría murciélagos frugívoros tropicales y subtropicales, o «megabates», que también realizan servicios ecológicos vitales en sus hábitats nativos polinizando plantas y esparciendo semillas.
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¿Por qué proteger a los murciélagos?
Los murciélagos no sólo comen insectos, sino que lo hacen con una eficacia asombrosa. En una noche, un solo murciélago marrón pequeño (Myotis lucifugus) puede comer 60 polillas de tamaño medio o 1.000 moscas del tamaño de un mosquito. Los murciélagos también suprimen las plagas sin insecticidas, por supuesto, que a menudo matan a los insectos beneficiosos como las abejas, las mariquitas y las libélulas.
América del Norte tiene unos 50 murciélagos autóctonos, principalmente micromurciélagos que hibernan en invierno. Muchos de ellos se enfrentan al grave peligro del síndrome de la nariz blanca (WNS), una enfermedad fúngica invasora que ataca durante la hibernación. Tras haber matado a millones de murciélagos desde 2006, está empujando a varias especies americanas hacia la extinción. E incluso sin el síndrome de la nariz blanca, muchos de los murciélagos del mundo ya sufren la pérdida de su hábitat, ya que los seres humanos reclaman lugares clave como los hibernáculos, las zonas de alimentación o los árboles de descanso.
Sin embargo, aunque la mayoría de la gente no puede hacer mucho contra las enfermedades o la deforestación, hay formas de ayudar a los murciélagos a sobrevivir. Añadir unos pocos elementos de hábitat puede convertir una granja o un patio en un oasis para los murciélagos, con recursos para aumentar su resistencia y ayudar a que sobrevivan más crías. Incluso en otoño e invierno, cuando algunos murciélagos hibernan, podemos preparar un refugio para que los supervivientes lo utilicen en primavera. Y como todo esto ahorra tiempo y energía a los murciélagos, pueden centrarse en tareas importantes, como atrapar insectos, y cuidar de sus adorables bebés.
Aquí tienes algunos consejos para atraer a los murciélagos a un hábitat cercano:
Cómo montar una casa para murciélagos
Una de las formas más sencillas y eficaces de atraer a los murciélagos insectívoros es proporcionarles un buen lugar para posarse. Las casas para murciélagos pueden adoptar muchas formas, desde pequeñas cajas en el patio trasero hasta torres independientes que sostienen grandes colonias.
A menudo la gente construye casas para micro-murciélagos por su cuenta, y puedes encontrar planos en Internet de grupos como Conservación Internacional de los Murciélagos (BCI) o la Federación Nacional de Vida Silvestre (NWF). También se venden en línea kits y casas para murciélagos preconstruidas, pero como los murciélagos son quisquillosos, BCI sugiere que se busquen vendedores con su certificación Bat Approved.
Aunque algunas especies hibernan en cuevas, los micromurciélagos suelen pasar los meses más cálidos en los árboles, donde buscan la seguridad de los espacios reducidos, incluidos los huecos entre la corteza de un árbol y su tronco. Por eso la zona habitable dentro de una casa para murciélagos es tan estrecha, ya que está diseñada para imitar los espacios que atraen instintivamente a los murciélagos.
«Los murciélagos investigan nuevas oportunidades para posarse mientras buscan comida por la noche», según una hoja informativa del BCI, «y son expertos en detectar grietas, fisuras, rincones y recovecos que ofrecen refugio contra los elementos y los depredadores».
No te molestes en utilizar cebos, advierte el BCI, ya que «las pruebas existentes sugieren firmemente que los señuelos o atrayentes (incluido el guano de murciélago) NO atraerán a los murciélagos a una casa para murciélagos». Además, suele ser ilegal comprar o vender murciélagos, e incluso si no lo fuera, es poco probable que funcione atraparlos y soltarlos en una zona nueva, gracias a su fuerte instinto de búsqueda. Sólo tienes que asegurarte de que la casa cumple varios criterios que interesan a los murciélagos, a saber:
Construcción
Las casas de los murciélagos suelen ser de madera con ranuras en las paredes interiores, ya que los murciélagos necesitan una superficie rugosa y asible para colgarse durante el día. Las mejores tienen cámaras de descanso de al menos 20 pulgadas de alto y 14 de ancho, y una zona de aterrizaje de 3 a 6 pulgadas cerca de la entrada. No se recomienda la madera tratada a presión. Es mejor dejar el interior sin pintar, pero considera la posibilidad de pintar el exterior para mantener la casa caliente.
Temperatura
La temperatura de la casa «es probablemente el factor más importante para que la casa de los murciélagos tenga éxito», según el BCI. La temperatura ideal para que las madres murciélago críen a sus crías está entre los 80 y 100 grados Fahrenheit (27 y 38 Celsius), aunque algunas especies son más flexibles que otras. Una vez construida y calafateada, hay dos formas principales de controlar el calor en una casa para murciélagos: la ubicación y el color. Coloca la casa donde reciba al menos seis horas de luz solar al día – orientada al sur, al este o al sureste en la mayoría de los climas – y pinta el exterior de un color oscuro para absorber el calor.
Colocación
La ubicación es fundamental en las casas para murciélagos, y no sólo por la luz solar. Aunque los murciélagos se posan naturalmente en los árboles, es más probable que ocupen una casa para murciélagos si está en un poste o edificio. Esto puede deberse a que los árboles son más accesibles para los depredadores, o a que las ramas pueden interponerse en el camino de los murciélagos cuando entran y salen de las casas montadas en los árboles. Por otra parte, algunos murciélagos evitan las zonas abiertas por miedo a los depredadores, como los halcones y los búhos, por lo que sigue siendo bueno tener árboles cerca.
Dondequiera que vaya la casa, debe estar a entre 4 y 5 metros del suelo y lejos de las luces eléctricas. Como las casas de los murciélagos tienen el fondo abierto para evitar que el guano se acumule en su interior, no la coloques directamente encima de una ventana, puerta, terraza o pasillo. Puedes poner una bandeja debajo para recoger el guano como abono, pero nunca utilices un cubo u otro recipiente profundo: cualquier cría de murciélago que se caiga de su nido podría quedar atrapada dentro.
Momento de la instalación
Puedes instalar una casa para murciélagos en cualquier momento del año, pero la primavera y el principio del verano son los momentos en los que es más probable que los posibles residentes la visiten. Ten paciencia y deja tiempo para que los murciélagos descubran y examinen la casa. Sin embargo, si sigue sin utilizarse después de dos años, intenta modificarla o cambiarla de sitio. Según la investigación de BCI, el 90% de las casas de murciélagos que atraen a los murciélagos lo hacen en dos años, mientras que el otro 10% tarda de tres a cinco años. Y si vas a desalojar una colonia de murciélagos de un edificio -una de las pocas veces en que los murciélagos pueden ser una molestia- monta una casa para murciélagos cerca con varias semanas de antelación.
Conservar las plantas autóctonas
Si quieres atraer a murciélagos, pájaros, mariposas o cualquier otra fauna autóctona, asegúrate de ofrecer una mezcla de plantas autóctonas. Esto es especialmente importante para los murciélagos que se alimentan de néctar o frutas, ya que las plantas autóctonas son su principal fuente de alimento. Pero también puede animar a los insectos autóctonos a congregarse, lo que es importante para los murciélagos insectívoros.
Eso puede parecer inútil si tu jardín ya está repleto de bichos, sobre todo si ese es el motivo por el que quieres tener murciélagos en primer lugar, pero a los murciélagos les gustan los hábitats con dietas diversas. Y como los murciélagos se alimentan al anochecer, también puedes plantar flores nocturnas para atraer a insectos nocturnos como las polillas.
Los árboles autóctonos son otra característica clave de un buen hábitat para murciélagos. Tanto si añades una casa para murciélagos como si no, pueden proporcionar valiosos lugares para posarse y descansar durante el verano. Y mientras que algunos micromurciélagos se refugian en cuevas para pasar el invierno, otros simplemente hibernan en los árboles. El murciélago rojo del este de Norteamérica, por ejemplo, pasa el invierno en las copas de los árboles, en las grietas de la corteza y, a veces, en los montones de maleza.
Proporcionar una fuente de agua
El hábitat ideal para los murciélagos se encuentra a menos de 400 metros (0,4 kilómetros) de una masa de agua natural, según BatHouse.com. Esto se debe en parte a que son buenos lugares para cazar insectos voladores, pero también a que perseguir polillas es un trabajo sediento. Sin embargo, esto no es crucial, y es posible atraer a los murciélagos incluso sin un lago o estanque cercano. Una gran pileta para pájaros o un estanque artificial pueden ser suficientes, así como las plantas con hojas que retienen el agua (aunque ten cuidado con las larvas de mosquito durante el verano).
Advertencia
Se sabe que los murciélagos beben de las piscinas, pero puede ser peligroso para ellos. Como beben rozando la superficie para dar tragos en pleno vuelo, las paredes altas de la piscina pueden impedir que un murciélago salga volando y atraparlo en el agua para que se ahogue. Si tienes una piscina, añade una rampa para que los murciélagos tengan una salida segura.
Mantenimiento de la casa de los murciélagos
Una vez que has atraído a los murciélagos, tu trabajo ha terminado en su mayor parte, pero no del todo. Hay muchas posibilidades de que los murciélagos vuelvan cada año, pero si les has dado una casa para murciélagos, puede ser necesario algún mantenimiento después de que se muden para el invierno.
«Los nidos de avispas y avispones deben limpiarse cada invierno después de que los murciélagos y las avispas se hayan marchado», explica BCI. «Puede ser necesario un nuevo calafateo y pintura o tinte después de tres a cinco años para evitar las fugas y las corrientes de aire». Las casas de los murciélagos deben vigilarse al menos mensualmente para detectar problemas como depredadores, sobrecalentamiento, madera podrida u otros daños. Y, obviamente, realizar las reparaciones sólo cuando la casa esté desocupada.
No es buena idea tocar o manipular a los murciélagos, tanto por su seguridad como por la tuya. Sin embargo, es una buena idea observar cómo cazan, lo que suele empezar poco después de la puesta de sol durante su temporada activa. Mientras observas cómo se abalanzan sobre ti, piensa en todas las picaduras de bichos y los tomates estropeados que te están ayudando a evitar.
Los murciélagos pueden ser monstruos, pero al menos están de nuestro lado.
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